Tuesday, April 17, 2007

El primer día

Pretendo escribir esto sin orden o secuencia lógica alguna, puede ser tomado como un desahogo o simplemente como una forma de matar el aburrimiento. Esencialmente va dirigido hacia ti, quiero decirte lo que no aun no te he podido decir. Digo aun porque sé que en algún momento lo haré. Todavía no he logrado saber si la razón por la que no te lo he dicho ha sido por falta de cojones, falta de momentos o porque sencillamente no me has dado la oportunidad.

Si llegase a ser por falta de cojones; pues qué puedo decir, no es fácil. Acepto que me intimidas un poco; pero no te convenzas tanto de todas formas. No me intimidas porque te vea como “inalcanzable”, la razón por la que me intimidas es porque de verdad quiero algo contigo y me da miedo echarlo todo a perder. Claro, también podría pensar que es mejor echarlo todo a perder a ni siquiera intentarlo; pero en el fondo sigo esperando ese momento. Si ya se, muy romántico y hasta de pronto iluso.

Créeme que cada día duro un buen rato pensando en qué hacer para convencerte, que estrategia aplicar para que dejes a tu novio. Por ahora mi mejor estrategia ha sido esperar un tiempo. Vamos además a quién engañas, yo se que te gusto un poco, lo puedo sentir y varias veces lo he visto en tus ojos. ¿Qué por qué lo pienso? Aunque no creas tengo varias razones. Por ejemplo; te he cogido mirándome en varias oportunidades y no mirándome distraída o porque te dejaste elevar; esas veces sin duda alguna he logrado percibir que tus ojos me buscaban a mi.

Pues está bien, te voy a dar el beneficio de la duda. Digamos que verdaderamente no tiene nada, que estabas aburrida y solo estabas mirando. ¿Qué me dices de la vez que de hecho te cogí hablando con tus amigas y señalándome? Vamos ni siquiera me conocías. Claro muchos dirán que seguramente hablabas mal de mi y por eso me señalabas. Tu y yo sabemos que no es así, no es así porque de hecho ni siquiera me conocías en ese momento. En ese momento estabas a 5 minutos de conocerme. ¿Te acuerdas de ese día?

Yo lo tengo bien gravado, llevaba con ganas de conocerte un buen tiempo. Sabía perfectamente quien eras; pero estaba esperando que alguien nos pudiera introducir. Precisamente ese día conocí a tu mejor amiga. Claramente ella fue el puente perfecto. Tu me señalabas y al corto tiempo te logré conocer.

Parecía ser que todo podía empezar a marchar sobre ruedas. Pero no fue sino media hora para que yo empezara a borrar con los pies lo que había logrado hacer con las manos. Claro en eso tienes toda la razón, ese día me pasé de buena gente. Pero no seas fuerte, no me juzgues así tampoco. La verdad es que fue la emoción, bueno está bien de pronto los tragos también jugaron su papel. El punto es que me dejé llevar por un romanticismo ridículo que me hizo pensar que ya todo estaba listo, mejor dicho tu y yo éramos el uno para el otro desde ese instante.

Bueno pero tampoco es para reírse. ¿Nunca has sentido conocer a una persona perfectamente sin verdaderamente conocerla? Bueno eso fue lo que me pasó contigo. Pero te voy a aceptar algo, estaba equivocado. Hoy en día, a pesar de todo creo que eres mejor de lo que pensé.

Bueno ya está como tarde, después te seguiré contando.